martes, 27 de enero de 2015

El secreto para no sufrir.

"Todo pasa por algo. Todo pasa, porque tiene que pasar."

Son cosas que suelo repetir muy a menudo; no solo a los demás. sino. mas que todo, a mi misma.

En aquel caso no sucedió nada de lo que yo esperaba que sucediera; de lo que deseaba que sucediera. Pero, a la par, sucedieron algunas cosas inesperadas, pero interesantes.

Es curioso lo que esta sucediendo actualmente en mi vida; debería sentirme mal, pero no tengo por qué hacerlo; ademas, es divertido. Yo también tengo derecho a tener mis "épocas".

Él dice que tengo cara de ser toda buena, de no tener ni un pecado, no hacer nada malo, y jamás poder hacer daño a los demás. Es divertido ver como las apariencias engañan.
Es cierto que tengo cara de niña buena, y suelo serlo; antes mas que ahora, pero aún lo soy, aunque ahora me doy algunos "permitidos" mas, como divertirme. Se que, algún día, el karma me lo cobrará, y será doloroso; pero, aún me sigo preguntando, ¿que estoy pagando, si antes era totalmente "buena"?. Supongo que son de ese tipo de preguntas sin respuesta.


¿Alguna vez analizaron la manera de hablar de alguien?.
Hay tantas cosas encantadoras (o molestas) en el hablar de una persona; su acento, las palabras que suele usar, el tono de su voz, la manera en que organiza una frase, etc.

No recuerdo el sonido de la voz suya; pero me he dedicado a analizar la de alguien mas, alguien que logra llamar un poco mi atención.
Es encantadora la manera en que organiza las frases, lo hace de una manera poco común, una manera que me cuesta explicar ya que aún no termino de descifrar. El tono de su voz es bastante grave, punto a favor, eso lo hace muy seductor y hace que desee que me susurre al oído; cosa que sucede al igual con su acento.
Luego tengo las palabras que usa; su jerga es bastante común, pero tiene un par de palabras exquisitas (no me refiero a palabras poco frecuentes o extrañas, sino a conocidas pero poco usadas). Pero su risa se me torna algo molesta, no me agrada escucharla por mucho tiempo.


Es gracioso como era inevitable que este chico, al cual tanto me entretiene analizar, se cruzara en mi camino, para entretenerme y distraerme, justo cuando tuve un derrumbe.

Mamá siempre me dijo "Nunca esperes nada de nadie, ese es el secreto para no sufrir." Porque, cuando esperas algo de alguien, y no obtienes eso que esperabas, te decepciones y, en muchas ocasiones, te deprimes; por eso no hay que esperar nada de nadie, y es mejor ponerse felices cuando recibimos algo que no esperábamos.



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